Qué es una MAN KILLER?

Una Man Killer es una mujer dinámica, enérgica, inteligente y decidida. Es la perfecta compañera para lograr las metas en común y tener libertad para lograr las personales.


Una Man Killer nunca será sumisa ni torpe al hablar, su voz es fuerte y decidida, sabe lo que quiere, lo que le beneficia y sabe cuando dejar atrás lo que no la ayuda a ser mejor.

Como todos una Man Killer tiene sus días malos, pero de ella misma depende de que solo sea eso, un día...


viernes, 10 de mayo de 2013

Gracias

 

 
Esta es tal vez una carta jamás escrita, una declaración pública jamás proclamada, un reproche jamás gemido, una saliva amarga que jamás emergió de lo más profundo de la garganta.
Es tal vez la bitácora de la sanación, la luz candorosa al final de frío tunel, la vuelta a la vida, la convicción forzada, la resignación perenne, el regreso a la realidad, la lobotomía emocional, la catarsis añorada.
Este es el agradecimiento más sincero y profundo a la persona que más daño me ha hecho en lo que tengo memoria, la persona que provocó que siempre lloviera sobre mí, que me hizo conocer la amargura, la agonía, la gris tristeza, que hizo de mí una mujer nueva.
Tengo que agradecerle a esa persona el haberle aumentado el gusto a mis sonrisas y carcajadas, porque cuando recuerdo mis lágrimas saladas y mi rostro quebrantado saboreo con más intensidad mis momentos de alegría.
Nunca había experimentado lo que es correr con todas las fuerzas, pronta a entregar todo lo bueno que hay en mí, hacia una pared y quebrarme los dientes por que no me di cuenta que la tenía encima y no me detuve. Gracias por eso.
Gracias por haber logrado secar unos ojos enamorados, los que me nacieron luego definitivamente ya no te ven igual.
Agradezco también la inmunidad que me provocaste ante tu verborrea, ya no me derrito como antes, ahora más bien huyo de ella.
Solo a esa persona le debo mi nuevo don adquirido: el de amar bien y mejor.
También le agradezco el haberme enseñado a nunca hacer lo que me hizo a mí a otra persona, eso sería demasiado ruin.
Agradezco a esa persona el haber tomado la decisión de hacerme a un lado, de acariciarme la cabeza y despacharme con una patada, de hacerme entender la poca importancia que tenía en su vida, gracias a eso a dejado a mi corazón libre para amar como se lo merece.
Tengo que darle las gracias a esa persona por haberme liberado de falsas expectativas, de recibir migajas de cariño, de sacrificios nunca apreciados, de llevar conmigo siempre un corazón contraído, de muchos años más siendo una sombra tenue o un antojo pasajero.
Faltan aveces las frases idóneas cuando se quiere dar las gracias, tengo muchas más en mi cabeza, las recuerdo de tanto en tanto y las digo al viento de cuando en cuando, tal vez llegue el momento cuando mi mente solo las balbucee, cuando pierdan sentido, cuando simplemente queden en el olvido.

domingo, 20 de enero de 2013

Corazn Partido


Es difícil decidir por dónde empezar a remendar un corazón partido, sobre todo cuando te enfrentas prácticamente a una escena del crimen como las que pasan en la tele, donde todo está hecho pedazos y es complicado empezar a unir ese desastre.
Es aún más difícil cuando no tienes experiencia en esos menesteres y cuando la escena de terror te involucra porque ese occiso corazón es de tu pertenencia.
He de confesar que pesar de ser una treintañera mi experiencia con respecto al desamor es relativamente escasa, por lo que desesperada he tenido que recurrir a los métodos que según mi percepción puedan sacarme más fácil de este hueco, lo cual no ha sido nada fácil.
Nunca en mi vida me había enfrentado al hecho de que alguien y a quien amo no me ame, eso me dejó en un estado de vulnerabilidad jamás experimentado; perdí el control, no pude aguantar las ganas de llorar hasta caer dormida y mi mundo se vino abajo. Entendí lo que sentían los que lloran con las canciones que antes no me cantaban nada, supe lo que era sentirme miserable como un perro, entendí cuando la gente dice que se puede prácticamente morir de amor, viví la desesperanza y saboree la tristeza como nunca antes.
Me di cuenta que no hay consuelo que valga, ni abrazos que calmen, tampoco auto justificaciones que expliquen mi desventura, pero lo que si he entendido es que mis únicos aliados en este dolor es el tiempo y la distancia,  tiempo para olvidar y distancia para no ver a esa persona nunca más en mi vida
He de admitir que tiempo atrás hice algo, un clamor a ALGUIEN y estoy casi segura de que ese clamor fue escuchado y por eso mi vida ha estado dando giros inesperados, giros que me ha costado sobrellevar, pero espero que a la larga me traigan algo especial y verdadero, no como hasta lo que ahora he conocido.
Me reconforta y tengo claro que siempre durante todo este tiempo di lo mejor de mí aunque no lo apreciara, abrí mi corazón de par en par aunque no le importara, eso me anima a pensar que puedo darme sin miedos ni reservas a pesar de que nada me garantiza que voy a recibir lo mismo.
Es inevitable pensar cómo sería mi vida si él nunca hubiera aparecido, pero luego trato de no gastar energías en eso, porque al final con él aprendí mucho sobre mí misma, conocí cosas de mí que no sabía que existían y crecí muchísimo, él me ayudó a ser mejor persona, pero también puso mis sentimientos a prueba con los peores tormentos, me dio las mejores alegrías, pero también me hizo sufrir como nunca antes, pero al final todo eso lo tomo como un gran aprendizaje.
Para él espero todo lo mejor, que coseche todo lo que va sembrando; tal vez en su vida yo sea ese pequeño error que le permita ser más precavido con lo que hace, dice y provoca, tal vez sea el experimento que le permita ser con otra lo que no fue conmigo.
Yo maldigo el día en que todo esto empezó, si hubiera tenido alguna idea ese día lo que sería mi vida años después hubiera salido corriendo de ese primer encuentro hasta donde mis fuerzas me lo hubieran permitido, sin volver a mirar atrás.
Espero con ansias el bendito día cuando esto sea solo un mal recuerdo, una borrosa pesadilla, ese día estaré dichosa por que será el momento en que me percate que ya mi corazón no sangra, que ya no está partido y que de aquel que solía ser mi adoración ahora con costos recuerdo su nombre.

jueves, 28 de junio de 2012

Daydreamer

5:10 am Suena el despertador.
(Sueño que aún duermo)

5:20 am Vuelve a sonar el despertador.
(Sueño que aún duermo)

5:30 am Me levanto y me ducho.
(Sueño que aún duermo)

6:30 am Lista salgo de la casa y me monto en el carro.
(Sueño que aún duermo)

7:59 am Metida en una presa.
(Sueño que llegué temprano al trabajo)

10:00 am Tengo miles de correos que responder.
(Sueño que alguno de esos sea una orden de compra sustanciosa)

Casi 12:00md Llevo el 25% de los correos contestados.
(Sueño con que alguien me llame y me invita a almorzar)

1:30 pm Almorzando frente a la computadora.
(Sueño con el espléndido almuerzo imaginario que tuve)

3:00 pm Reunión en la oficina.
(Sueño con que alguien desconocido pero con una foto de perfil creíblemente atractiva me confiesa que me desea)

4:30 pm Terminando de contestar correos y teniendo conversaciones con clientes.
(Sueño que todos ellos me dicen que soy maravillosa y que no pueden vivir sin mí porque hago crecer sus negocios y que además tengo una encantadora risa)

5:30 pm Salida del trabajo pero me quedo terminando algunos pendientes.
(Sueño con que alguien me invite a una birra)

6:10 pm Salgo de la oficina y me acaban de avisar que hoy tenemos partido.
(Sueño con meter un golazo de chilena)

8:30 pm Termina el partido y me voy para la casa.
(Sueño con revisar el celular y encontrar miles de mensajes acerca de cosas importantes e interesantes que requieren de mi atención)

9:00 pm Veo noticias.
(Sueño que estoy dormida)

10:00 pm Me acuesto a dormir.
(Sueño con…si supieran todo lo que sueño…)

Imagen DayDreamer de Michelle-Spiziri

¿Qué hay de malo conmigo?

Después de muchas experiencias, tropezones y situaciones amorosas desafortunadas más de una de nosotras, en algún momento de la vida, se ha hecho esta pregunta, LA pregunta.
Y es que estoy casi segura de que la mayoría de nosotras hemos presenciado, escuchado por teléfono o leído en un mensaje cómo nos hacen pensar que las del problema no somos nosotras pero al fin y al cabo toda la culpa es nuestra.
“Ya no eres la de antes”, “Me he dado cuenta de que somos muy diferentes”, “Realmente no eres lo que yo busco”, “Por tu bien es mejor dejarlo hasta aquí” , “Definitivamente no somos el uno para el otro”, “No te has dado cuenta pero has cambiado”, “ Vos sabés, muy en el fondo, que esto no funciona” son frases que han caído sobre nuestras cabezas como un baldazo de agua fría a través de la historia, y así como comunes son ambiguas porque al final se supone que “no eres tú, soy yo el del problema”.
Y es en este momento de duda, momento en que ya ni sabemos quienes somos, cuando emergen las consoladoras, que con una incuestionable buena intención tratan de acabar con nuestro mar de lágrimas y mocos, pero que a la postre fortalecen el sentimiento de no saber quien carajos somos.
“Él se lo pierde”, “Es un imbécil”, “Ese mae está loco”, “Dios sabe por qué pasan las cosas”, “Al final terminó siendo como todos los demás”… la dolida y desubicada víctima del abandono escucha silenciosa los comentarios de todas las féminas cercanas a ella: madre, hermanas, hijas, amigas, compañeras de trabajo y aveces incluso la misma exsuegra y excuñadas, todas agregándoles a las frases dosis de dramatismo derivadas de sus propias experiencias.
La doliente escucha y mentalmente repasa las imágenes, actitudes y acciones que ilustran cada frase, sabe que algunas el tipo se las merece, otras tal vez no, porque habremos quienes nos sabemos inocentes de cualquier acción que atentara con la relación, en otras ocasiones sabemos que hemos metido la pata pero no queremos aceptar nuestra culpabilidad y en otras no tenemos la menor idea en qué fallamos.
¿Podrían acaso esos pelagatos, ingratos, malos hombres, insensatos y malhechores tener la decencia de agendar con cada una de nosotras una cordial reunión en la cual nos señalaran nuestras faltas?
¿No sería más fácil corregir lo que se tenga que corregir cuando tenemos la certeza de qué es eso que está chueco en nosotras?.
¿No es acaso un acto de misericordia hacia la recién abandonada señalarle sus faltas para que ella trabaje sobre ellas (si le da la gana)?.
Puede que el resultado de esa retroalimentación no sea más que composta humana, pero nos puede ayudar a delinear con un trazo más fino el perfil de hombre que queremos de nuestro lado y dejar de “pifiarla” tanto.
Nada perdemos al buscar explicaciones, todas tenemos derecho a un recuento de los daños.

martes, 13 de marzo de 2012

Feliz cumpleaños mamá

Escuchar sus pasos, su andar firme pero a veces pausado me estremecía el corazón, era como ser víctima de una corriente eléctrica con aroma a mamá.

Cuando se acercaba hasta donde yo me encontraba me parecía imposible lograr bajar la mirada, por que su cara me atraía como un imán y me cegaba con su resplandor. Su cabello siempre bello, con la ondulación perfecta, ningún cabello rompía la fila, todos siempre firmes en armonía. Esa tez blanca que hace juego con mi oscuridad, tan lisa y perfecta ante cualquier par de ojos enamorados.

Como resistirse a esa sonrisa de película y a sus diferentes formas de decir te quiero, madre aún hoy me produces escalofríos al verte siempre tan luminosa, como proveniente del Olimpo, siempre tan hermosa, tan poderosa, de toque mágico, de látigo azucarado.

Mami aún hoy siento ese mismo amor de niña, que en este cuerpo acelerado ha permanecido intacto, como la primera vez que abrí los ojos en tus brazos y con un chillido te dije te amo.

martes, 8 de noviembre de 2011

Sí, yo soy de esas…

Que no pitan cuando manejan por miedo a que les metan un plomazo.
Que mueren de felicidad cuando encuentran una buen promo de cosméticos.
Que se les olvida persignarse cada vez que pasan frente a una iglesia.
Que no tienen ningún zapato de tacón que les quede cómodo.
Que cuando se ríen con ganas tienen una carcajada de terror.
Que cuando compran un regalo tienen que comprarse un cariñito para ellas mismas.
Que se emocionan con todo y al final no hacen nada.
Que comienzan dieta todos los lunes.
Que de cocina saben lo suficiente como para no morirse de hambre.
Que le dan campo a todo mundo cuando maneja.
Que no pueden dejar de verse en todos los espejos al alcance.
Que se ofuscan cuando detectan un pelo fuera de contexto.
Que aparentan que comen menos de lo que realmente hartan.
Que aún creen que el amor se consigue a punta de detalles.
Que ponen el despertador 10 minutos antes para dormir 20 minutos más.
Que requieren de un chocolate diario para sobrevivir.
Que compran una blusa para alegrarse los detestables lunes.
Que escriben en post it las frases bonitas que la gente les dice.
Que les encanta ir de compras al super, a comprar lo que sea.
Que prefieren parquear de trasero aunque les cueste un huevo.
Que desechan cualquier foto que no les favorezca.
Que se deprimen cuando alguien les dice gordis, indiferentemente del grado de ternura con el que lo digan.
Que tienen que canalizar su facilidad de dar amor ya sea por medio de su novio, esposo, jefe, exjefe, compañero, primo lejano, amigo, compadre, desconocido.
Que hacen por los demás lo que les gustaría que hicieran por ellas pero que definitivamente nunca hacen.
Que sin problema pueden dormir dos días seguidos.
Que no se les hace tan difícil reírse de ellas mismas.
Que sienten que la frase “Dios sabe por qué hace las cosas” le hace falta la parte donde averiguamos el por qué.
Que de vez en cuando se dan el lujo de dormir con el perro.
Que se les enchina la piel cuando escuchan una canción de Ray Charles.
Que descubren una película buenísima que todo el mundo vio hace unos 10 años cuando era un estreno.
Que mastican el chicle y lo botan justo cuando ya no le queda sabor.
Que aveces quieren dejar aflorar la rebelde que hay en ellas.
Que aunque se parezcan y cualquiera dice que hay muchas iguales, son únicas, imperfectas y sobre todo adorables.

Pintura: "Mujer Durmiendo con Perro" de Maria Sitjar.

martes, 4 de octubre de 2011

Esperando...


Sentada, solo esperando, sin hacer mucho ruido, en medio de la algarabía nocturna fumándome un cigarro mental; tarareaba en voz baja la canción “Fly me to the moon” cuando de pronto en el bar comenzó a sonar la tonada y la canción que bailaba por mi mente se escuchó por los alto parlantes.

Sorprendida abrí los ojos y cerré el pensamiento: nadie me garantizaba que así como la canción se escapó de mi cabeza no se iban a escapar los pensamientos que estaba teniendo y que estos tan entregados como descarados se escucharan claros y fuertes por todo el lugar.